Renovación del servicio de mantenimiento de zonas ajardinadas del Hotel Santa Bárbara Golf and Ocean Club
Editar embriones para eliminar la discapacidad auditiva heredable
Un hijo de padres con sordera también tendrá sordera. Para evitar esta discapacidad, hoy en día la única opción es la donación de gametos.
Editar embriones para evitar la discapacidad auditiva heredable es el proyecto del científico ruso Denis Rebrikov.
Mientras su proyecto aún permanece a la espera de saber si finalmente dispondrá de los permisos necesarios para ser llevado a cabo, el nombre de Rebrikov ha saltado al candelero después de que la revista New Scientist recogiera en un artículo en exclusiva el anuncio de este nuevo proyecto que consiste en modificar embriones para eliminar la forma heredable de sordera.
Rebrikov defiende que si los padres con la mutación quieren tener hijos sin sordera y biológicamente de ambos su propuesta es la única opción
Su propuesta científica para conseguirlo se centra en una forma genética de sordera, originada por una mutación en el gen GJB2. Consiste en una afección de herencia recesiva. Esto quiere decir que solo se puede expresar si se recibe la copia afectada de ambos progenitores. Por eso, si el padre y la madre la padecen, con total seguridad, su descendencia también.
Cuando estamos ante un caso así, los especialistas, para evitar que el descendiente padezca la sordera, suele recomendar utilizar gametos (óvulos o espermatozoides) de donante y, en caso de que se mantengan los de uno de los padres, realizar un diagnóstico genético preimplantacional, en el que se hace un estudio genético de los embriones previo a la implantación y se seleccionan solo los que estén sanos.
Esta es, sin duda, una vía segura, pero exige que la descendencia no proceda biológicamente del padre y la madre.Y es aquí donde Rebrikov encuentra su más potente argumento para lograr todos los permisos necesarios, ya que asegura que si no se quiere renunciar biológicamente, su propuesta es la única opción.
¿Justifica el fin los medios empleados?
Difícil responder a esta pregunta. Pero lo cierto es que el científico ruso ya cuenta con 5 parejas dispuestas a participar de forma voluntaria en su proyecto. Todas estas parejas, tanto madre como padre padecen sordera y, por supuesto, ninguna de ellas quiere renunciar a que sus hijos sean de ambos biológicamente hablando.
Decimos que es difícil responder a esta pregunta porque lo cierto es que esta discapacidad no supone una amenaza para la vida del recién nacido. Por lo que probablemente el debate quede siempre abierto. Incluso, existen parejas con esta condición que se niegan a evitar que sus hijos hereden esta condición con el objetivo de perpetuar lo que se conoce como “la cultura de la sordera”.
Queda el debate abierto mientras las autoridades pertinentes se pronunciar y nos permiten saber si finalmente este científico podrá llevar a cabo su proyecto…
Pero mientras, cuéntanos, ¿cuál es tu opinión al respecto?